De la Cuba actual y del compositor católico, José Maria Vitier, de su Misa a la Virgen de la Caridad del Cobre (patrona de Cuba), Déjame Tomar Asiento, en la interpretación de Amaury Pérez, ya presentado en tema anterior en este blog:
De la Cuba de antes de 1959, del maestro y poeta comunista Raúl Ferrer, también en la interpretación de Amaury Pérez,
ROMANCE DE LA NIÑA MALA
POEMA DE RAÚL FERRER
Romance de la niña mala
Música: Pedro Luis Ferrer
Un vecino del ingenio
dice que Dorita es mala,
para probarlo me cuenta
que es arisca y mal criada
y que cien veces al día
todo el batey la regaña.
Que a la hija de un colono,
le dio ayer una pedrada,
y que la del mayoral
le puso roja la cara,
quién sabe con qué razones
por nosotros ignoradas.
Que si la visten de limpio
al poco rato su bata
está rota o está sucia,
que anda siempre despeinada,
que no estudia la lección
y nunca sabe la tabla,
que el sábado y el domingo
se pierde en las guardarrayas
y recogiendo guayabas.
Y yo pregunto: “Vecino,
vecino de mala entraña,
¿quién puede decir que sea
por eso mi niña mala?.
Si hubieras visto lo íntimo
de su vida y de su alma
como lo ha visto el maestro
¡Qué diferente pensara…!
Verdad que siempre está ausente,
pero si viene no falta,
entre sus manitas breves
un ramo de rosas blancas
para poner al Martí
que tengo a mitad del aula.
Con quien no tenga merienda
parte a gusto su naranja;
si cantamos al salir
se oye su voz la más alta,
su voz que es limpia y alegre
como arpegio de guitarra.
Y cuando explico aritmética
le resulta tan abstracta
que de flores y banderas
me llena toda la página.
Y prefiere en los recreos,
cuando juegan a las casas,
jugar con Luisa: la única
niña negra de mi aula.
A veces le llama Luisa
y a veces le dice: ¡Hermana!.
Y cuentan los que la vieron
que en aquella tarde amarga
en que no vino el maestro
era la que más lloraba.
Cuando se premie el cariño
y lo rebelde del alma,
cuando se entienda la risa
y se le cante a la gracia,
cuando la justicia rompa
entre mi pueblo y su marcha
y el tierno botón de un niño
sea una flor en la esperanza,
habrá que poner al pecho
de mi niña una medalla
aunque el batey, malicioso,
me le dé tan mala fama,
y tú -mi pobre vecino-
no entiendas una palabra.
Notas:
Colono.-cultivador de caña para el ingenio.
Ingenio.-fabrica de hacer el azucar de la caña
Batey.- poblado alrededor del central azucarero o ingenio.
AVISO; PARA QUE NO HAYA INTERFERENCIA AL AUDIO DEL VIDEO, DEBEN QUITAR EL VOLUMEN EN EL LISTADO DE CANCIONES DE SILVIO RODRIGUEZ QUE PRECEDE ESTA ENTRADA.
O MEJOR SALGAN DE LA PAGINA PRINCIPAL, GENERAL, Y ENTREN EN ESTA ENTRADA, DESDE ABAJO Y LA DERECHA DONDE APARECE EL ARCHIVO DEL BLOG.
8 comentarios:
Poco a poco he ido conociendo, gracias a ti, más de Amaury Pérez. Espectacular la interpretación del poema. La guitarra impecable, con ese toque inconfundible de la Nueva Trova entre delicado, místico e impetuoso.
Fíjate que la Misa cubana a la Virgen de la Calidad del cobre la tenía en un cd que compré en el año 2000. Si mal no recuerdo la obra se estrenó cuando Juan Pablo II visitó Cuba en 1997 (ay me parece ver todavía las imágenes de Gabo y Fidel en una misa o acto litúrgico del Papa en La Habana). Pues bien, en ese CD la primera canción, "Déjame tomar asiento", la cantaba Silvio Rodríguez, en una versión maravillosa. La misa es espectacular, tiene como 12 temas, todos con esa mezcla entre música clásica y ritmos caribeños.
Mi querida amiga y hermana. No imaginas la emoción que siento, y la sonrisa que me sacas, cada vez que veo tus comentarios en mi blog. El que tú me leas es para mí un honor que no puedo describirte con palabras. Y ese honor está inflado de cariño, respeto, admiración y alegría. Gracias a Silvio conocí tu puente, de verdad es un regalo de Dios. Felicidades siempre. Un abazo enorme
Carlos Eduardo
¡Qué bonito, Iraida!
Hasta hoy no lo había podido escuchar, porque desde que pusiste la "Segunda cita", lo invadía todo y yo no era capaz de pararla, que ya sabes que soy una torpe.
Cariños,
Carmina
Carmina, pero hasta que pudiste pararlo, es lo bueno. Algo se te pego. Pronto te veo abriendo un blog propio.
Andas muy apuradita, extrañando el blog de Silvio.
Ese poema es bello, y mucho más si se le sitúa en tiempo y espacio, Probablemente sea el reflejo de la experiencia del autor, maestro, quien ejerció su profesión en Yaguajay, poblado de la antigua provincia de Las Villas. Una gente muy interesante, quien posteriormente sería viceministro de educacion en la Revolución y un día, mientras yo daba clases me cayó sorpresivamente en el aula. En el pizarrón tenía yo anotados los nombres de patricios de nuestro siglo XIX, sobre cuyo movimiento reformista trataba la clase. Entonces, de inmediato, , se dirigió a los alumnos y les dijo con esa gracia y espontaneidas tan cubanas, (disculpa de eso estoy orgullosa) y les dijo "si les hablan mal de ellos me avisan".
¿Por qué te cuento esto, Carlos Eduardo?
Verás. En los procesos revolucionarios se dan muchos extremistas. Personas que solamemte toman como meritorios aquel que profesa las ideas más radicales, que en nuestra Cuba de entonces eran los de idea independentistas. Pero este hombre no era un improvisado, tenía décadas de lucha anteriores a la llegada de la revolución, unida a una educacion marxita. Y buenos sentimientos como pude personalmente comprobar mucho más tarde.
Lo cuento porque siempre es necesario que algunas personas piensen sobre estas cosas, y se moderen, sin que eso signifique renunciar a las ideas propias, pero entender las de otros,lo que otro ha podido contribuir al desarrollo de una sociedad, y ese era el caso de los reformistas cubanos que no aspiraban a una separación inmediata, de España mediante la guerra, sino como un proceso evolutivo a partir de ciertas concesiones economicas y políticas. Hay momentos en que el extremismo aleja mas que acerca a los objetivos.
Perdóname mi lata de historia, Carlos Eduardo.
No tengo la Misa cubana. Debe ser muy hermosa. En ese año de la visita del Papa a Cuba, (creo 1998) seguí los acontecimientos desde acá, pero con limitaciones porque trabajaba aún fuera de casa.
Te juro que no se porqué, no tengo idea de porqué te sientes tan orgulloso de que yo te lea, Carlos Eduardo.
Hermana. ¿Cómo quieres que no me sienta orgulloso de que me leas, cuando aquí- en tu Puente Cubano- he aprendido tanto de tu pueblo? Además ese amor por tu tierra, por los tuyos, por la Revolución, en fin, por la vida me hacen sentir muy identificado. Fuera de eso eres la primera cubana que ha léido y comentado algunos de mis escritos y creo que ya te habrás dado cuenta, amo a Cuba.
Me preguntas en el post del cumple de Adriana qué significa mi nick.
Caselo le decían a mi abuelo paterno. Y al conocer la historia de ese mote, decidí que mi seudónimo de escritor sería Caselo.
En el siguiente enlace encontrarás una crónica de escribí acerca de eso:
http://elmagodetucorazon.blogspot.com/2009/03/el-autentico-caselo.html
Un abrazo amiga
Carlos Eduardo
Caselo: creo que de ahora en adelante quedaré usando el apodo.
El enlace no funciona, pero en el archivo encontré el relato sobre tu abuelo gracias al año y mes que indicaba el enlace, mar 2009.
Sabes lo unico que me gustaria fuera distinto de tu blog (chisst...yo siempre metida) los colores para nada tiene que ver con su contenido, a mi juicio, o quizas gusto. El contenido es maravilloso, "por Dios", como diria mi nietecita, cada vez que algo le llama fuertemente la atención.
Eres un escritor ya maduro, chico. Me pregunto si has agrupado tantos relatos en un libro o dos, o varios; hay tanto bueno en el blog que corre una el peligro de ponerse a leer alli inteminablemente, sin atender a nada más.
OYe, ¿sigues siendo fanático del Millonarios? ¿Dejaste de fumar? Ese relato esta con final inesperado y todo, como buen cuento, aunque no sea cuento. Titulo: Un triunfo que no supo a gloria...
Y que bien ese "Adios con un canto" acompañarlo de Silvio con "Requiem">
Que va, que va, es demasiado bueno tu blog...un peligro, puede una volverse adicta al mismo.
Y ese entrada con el
Sobre el motivo de los elogios, te digo que soy yo quien se honra en visitar tu blog. Y lo recomiendo altamente.
Hermana y amiga. Hasta el momento sólo me publicó un texto el periódico El Tiempo de Colombia. En el 2007 se declaró a Bogotá Capital Mundial del libro, y entre todos los homenajes que se hicieron, el Tiempo invitó a participar de una convocatoria: "La ciudad jamás contada". Decía que podrían participar todas las personas que viviéramos en Bogotá, mayores de 15 años, enviando la propuesta para una historia que hablara de ciudad. Elegirían diez personas que luego estarían guiadas por un acompañente (cada una) durante el proceso de elaboración de la historia. Y finalmente se publicaría a nivel Nacional. Por esa época trabajaba como operador en un servicio de información telefónica de mi país, llamado el 113. Básicamente se ofrece información del directorio telefónico. Entonces pensé: no puede haber algo más original que hablar de Bogotá a partir de las voces que me llaman a diario. Envié vía internet un pequeño texto explicando mi idea. Un mes después se comunicaron conmigo del periódico, me citaron con la escritora que leyó mi propuesta (Yolanda Reyes, escribe para jóvenes y niños) y ella me eligió. En la columna izquierda de mi blog hay algo que dice "La ciudad jamás contada". Da click ahí y podrás ver lo que me publicaron. Debajo de ese enlace hay dos videos en los que salgo, refrentes a esa convocatoria.
Me apasiona el fútbol y sigo siendo hincha de Millonarios, pero ya no soy fanático. Me volví como Eduardo Galeano quien afirma, palabras más, palabras menos, que ahora es una especie de mendigo del buen fútbol que va de estadio en estadio con un sombrero pidiendo "una buena jugadita, por amor de Dios". Y cuando sucede ese milagro lo celebra sin importar de qué país o equipo fue el que lo realizó. Jejejeje y no he dejado de fumar amiga.
De nuevo gracias por tu visita a mi casita de sueños. Eres bienvenida. Tendré en cuenta tu opinión sobre los colores del blog; en realidad quiero cambiarle un poquito la cara, estoy buscando una que se ajuste a lo que en este momento quiero expresar.
Un abrazo enorme mi querida Iraida,
Carlos Eduardo
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